|
Casa de los Clemente de Lamata. |
La primera referencia documental fideligna
concerniente a los Climent de Lamata es de 1549. En ese año Matheu Climent, ferrero, prestó 1000 sueldos a varios
vecinos de Camporrotuno y Castejón de
Sobrarbe; éstos debían pagarle por ello una pensión anual de 50 sueldos. En
1552, los jurados y concejos de Puértolas, Bestué, Escuaín y Belsierre pagaban
50 sueldos de pensión anual a Matheu Climent. Estos datos nos informan que la
casa tenía una buena situación económica, lo que posibilitaba el préstamo de
dinero.
En 1566 el valor de los bienes inmuebles de Matheu Climent
superaba los 1165 sueldos jaqueses, un valor discreto. Poseía, además de unos
cuantos campos, casa, cellero, bodega,
trillar, corrals y patios que limitaban con
dos vías públicas y ferrienals de Pedro Miguel. La posesión de pocos campos
y una economía saneada apoya la hipótesis de que la casa en aquellos momentos
no era antigua; además no aparece en los censos de 1495.
En 1597 los derechos sobre el préstamo del año 1549
fueron cedidos a otro prestamista. En ese momento regían los designios de la
vivienda Marquo Lanau, su esposa María Climent y Esperanza Torres viuda de
Matheu Climent.
Infanzonía
de los Climent – Clement – Climente
En
el año 1630 se realizó un proceso de infanzonía en favor de Vicencio Climent y
Francisco Luis Climent, tío y sobrino, vecinos de Huesca. Según sus testimonios,
en 1360 el rey Pedro IV de Aragón concedió el título de infanzón a Guillen
Climent, vecino de Nerín, del Valle de Vió. El origen del linaje estuvo en
Nerín, si bien en 1630 en este pueblo sólo quedaban paredes y vestigios de lo
que fue el casal o palacio de los Climente. Se conservaba en la memoria de los
vecinos del pueblo que la casa estaba situada al suelo del lugar y limitaba con casa de Pedro Esquein, vía pública y plaza común del concejo. Después del año 1452 mudaron su domicilio
desde Nerín a otras partes. En el documento se utiliza indistintamente
Climent, Clement y Climente, que son lo mismo.
La
genealogía de la familia se halla explicada en el proceso, si bien tiene muy pocos
visos de ser real puesto que hay menos generaciones de las que cabría esperar
para tan largo lapso de tiempo; la evolución, supuestamente, fue así:
En
torno a 1362 vivía, en la localidad de Nerín, Guillem Climent (I), quinto abuelo del exponente.
Guillem tuvo un hijo llamado Jayme Climent
(II); éste murió alrededor del año
1470. Hijos de Jayme fueron Pedro y Luys Climent, ambos naturales de Nerín.
Pedro Climent (III), el heredero,
una vez fallecido su padre, trasladó su domicilio a Lamata. Luys Climent (III) fue a vivir a Huesca, donde murió en 1522. Luys Climent tuvo
un hijo llamado Luys (IV) que fue notario de Huesca el cual
falleció en 1568. El notario nombró heredero de sus bienes a su hijo Gerónimo
Climent. Gerónimo (V) contrajo matrimonio con Beatriz Lastanossa y
tuvo al menos dos hijos: Luys (padre
de Francisco Luys, el exponente) y
Vicencio. Este Vicencio (VI)
contrajo matrimonio con Magdalena Venasque con la que tuvo un hijo al que
llamaron Joseph (VII). Luys Climent
Lastanossa (VI) casó con Beatriz
Gerónima Conessa de cuyo matrimonio nació Francisco Luys (VII).
Según
este proceso los Clement, o Climent, de Lamata eran originarios de Nerín, y en
Lamata habían ejercido oficios de infanzones, tales como jurado del concejo. En
la iglesia se sentaban en los asientos destinados a los infanzones e hidalgos
del lugar. Los Climent de Huesca también ejercieron los cargos de Justicia y
jurado, y otros, en el concejo de Huesca.
Así mismo, se afirma que Luys
Climent otorgó una procura en 1483 en favor de Pedro Climent, su hermano,
habitante en Lamata; le facultó para poder vender y permutar cualquiera de sus
bienes sitos en Nerín. Gerónimo Climent (V) instituyó un legado para poder
casar huérfanas parientes; se beneficiaron Juana Climent, mujer de Pedro
Franco, y Esperanza Climent, esposa de Miguel Samitier, vecino de Lamata.
Creo
que no todo lo que dijeron los interesados era cierto. Es bastante improbable
que en torno al año 1470 los Climent llegaran a Lamata, a mi modo de ver lo
hicieron más tarde. Lo que sí parece verdadero es que su origen estuviera en
Nerín. También resulta razonable que los Climent de Huesca y Lamata fueran
parientes. En 1626 figuraba como infanzón Luis Clemente, de Lamata.
El escudo
En la fachada
principal de casa El Herrero de Lamata, sobre la puerta de entrada, en un
pequeño hueco, se halla la erosionada piedra armera de los Climent, realizada
en caliza blanca. El escudo es cortado, en jefe haz de tres flechas atadas en
el centro, estando todas hacia abajo; en punta, embarcación de tres velas
desplegadas, si bien la erosión no permite verlas todas. Timbre de hidalguía y
lambrequines de cueros recortados. En función de las características del
conjunto heráldico y la historia del linaje, creo que se trata de una obra que
fue realizada en el primer tercio del s.XVII.
Testamento de Luis Climente de Lamata
El
30 de diciembre de 1649 Luis Climente hizo testamento. Dispuso que su cuerpo
fuera enterrado en el cementerio de Lamata, asistiendo tres clérigos. Por su
alma se haría un trenteno mayor de misas y otro menor; también tres misas en el
altar de Nuestra Señora del Rosario. Su mujer se llamaba María Romeu y tenían
cuatro hijos: María, Ana, Cisclo Francisco y Pedro Felipe. Nombró a su esposa
usufructuaria de sus bienes. Así mismo nombró, entre sus familiares, varios
hederos fideicomisarios los cuales deberían elegir a uno de sus hijos para ser
el heredero de la casa.
En
abril del año siguiente María, la viuda, contrajo matrimonio con Pedro Linés,
de Olsón, con el consentimiento de los herederos fideicomisarios. Pedro Linés,
el contrayente, tendría que ser sustentado, de por vida, en la casa de Climente
de Lamata; en compensación él trabajaría por el bien de la casa, recibiendo 160
escudos, a razón de cuarenta por año que le pagaría su mujer. También acordaron
casar un hijo de María Romeu y el difunto Luis Climente con una de las hijas de
Pedro Linés. En este caso, como en muchos otros, el matrimonio fue de
conveniencia, el amor quedaba en un segundo plano. Este acuerdo se llevó a
efecto, casando Cisclo Francisco Climente con Gracia Linés.
En
1681 contrajo matrimonio Miguel Martín Climente, hijo de Cisclo Francisco y
Gracia, con Magdalena Fumanal Mora, natural de Arasanz. Magdalena, que recibió
2000 sueldos en concepto de dote, era sobrina de Mosén Pedro Fumanal, vicario
de Escanilla y Lamata. Al poco de celebrarse el matrimonio, falleció el
heredero sin descendencia y hubo que buscar otro. Magdalena, la viuda, contrajo
de nuevo matrimonio y fue a vivir a casa Falceto de Olsón en 1686.
Siglo XVIII
Hay
pocos datos de este linaje en la primera mitad de centuria. El apellido Climente
se transformó definitivamente en Clemente. En 1733 Pedro Clemente figuraba como
infanzón de Escanilla y Lamata. En 1749 contrajeron matrimonio Martín Clemente
y Francisca Lacambra, de Camporrotuno. A mediados de siglo vivían en la casa al
menos ocho personas: Martín Clemente, Francisca Lacambra, María Santaliestra,
Joseph Clemente, Bartholomé Clemente, Antonio Clemente, Rosa Clemente y Águeda
Cavero. A finales de siglo eran los herederos Joaquín Clemente y María
Sampietro, ella natural de Sarsa de Surta.
|
Habitantes en casa Clemente, año 1755 |
Siglos XIX y XX
A
principios del siglo XIX Martín Clemente Sampietro, el heredero, contrajo
matrimonio con María Arasanz, de Lamata. Un hijo de este matrimonio, llamado
Antonio, casó en 1843 con Rosa Olivar Lacambra, también de Lamata.
En
1874 Antonio Clemente Olivar fue nombrado heredero y contrajo matrimonio con
Rosa Castillo Arasanz, vecina de Hospitaled de Espluguillo.
En
1907 Antonio Clemente Castillo, el heredero, casaba con Dolores Lalueza Lueza,
natural de Abizanda.
En
torno a 1940 los Clemente de casa El Herrero, también conocida como Ferrero,
decidieron ir a vivir a Huesca. Fue una emigración temprana, no motivada por
necesidades económicas. Los Clemente vendieron su casa a un vecino de Mediano,
pasando a ser ocupada por unos arrendadores: los Coronas de Jabierre de Olsón,
lo que propició que la vivienda también sea conocida como Casa Coronas.
Origen y distribución
El
apellido Climent–Clemente es relativamente frecuente en España, estando
distribuido por todo el territorio. Creo que el origen de este apellido está en
muchos sitios a la vez.
Los
Clemente de Lamata tienen su origen en Sobrarbe, posiblemente en Nerín. No
obstante, el origen primigenio debió estar en un pequeño núcleo de población
llamado San Climent o San Clemente, hace siglos deshabitado, situado cerca de
Labuerda.
En
Lamata el apellido estuvo unos 400 años, desde mediados del s.XVI hasta 1940.
Los herederos de la casa fueron herreros y agricultores. También, de forma
temporal, ejercieron de prestamistas. Fue una casa que se caracterizó por su
estabilidad, si bien se acabó el linaje en el pueblo al trasladarse a vivir a
Huesca.