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miércoles, 30 de mayo de 2018

Dinero llegado desde Cataluña, año 1608


 
Siglos atrás, cuando se carecía de liquidez, se buscaba dinero prestado, bien en la modalidad de comanda o en forma de censal. El prestamista cobraba un interés. Lo normal es que estos contratos se hicieran entre personas que vivían relativamente cerca. El caso que ahora citaré es llamativo por la lejanía de los prestamistas.

El día 10 de junio del año 1608, en el lugar de Samitier, Miguel Olibera y Joan López, vecinos del citado lugar, reconocieron tener en comanda, en favor del abad, frailes y convento de Nuestra Señora de “Monsarrat”, del principado de Cataluña, 780 sueldos jaqueses. El documento se hizo ante notario, actuando como testigos los reverendos Mn. Pedro Just, rector de Samitier, y Mn. Joan Just, habitante en Arcusa.

 

martes, 31 de octubre de 2017

Heráldica en el Museo de Artes Populares de Serrablo

El pasado sábado asistí a la reunión anual de los Centros Colaboradores del IEA, representando al Centro de Estudios de Sobrarbe. Tuvimos unos magníficos anfitriones: la Asociación Amigos de Serrablo. Visitamos sitios emblemáticos de los alrededores de Sabiñánigo, entre ellos el Museo de Artes Populares de Serrablo, oficialmente conocido como Museo Ángel Orensanz y Artes de Serrablo.

Hoy hablaré de las representaciones heráldicas que se conservan en el citado museo, asignables a los siglos XVI y XVII.

1.   Escudo procedente de Abenilla
 
Elaborado en madera. Es ovalado, cortado y medio partido: 1º torre donjonada y sin mazonar; 2º dos palos; 3º dos palos. Lambrequines de lazos.
El aspecto de este escudo, en cuanto a cargas, es muy similar al de la villa de Torla, si bien hay tres cuarteles en vez de dos.

2.   Escudo procedente de la iglesia de Espierre
 
Conjunto heráldico elaborado en placa de caliza blanca. Escudo rectangular, con el campo cargado de torre con cinco almenas triangulares, siendo de mayor tamaño las de los extremos y la central. Lambrequines consistentes en sogueado que rodea el escudo. Asignable al siglo XVII.

3.   Escudo del señor de Latrás, procedente de Latrás

Conjunto heráldico elaborado en placa rectangular de arenisca que presenta varias fracturas. Escudo cuadrilongo de base redondeada, con el campo cargado de ocho palos recortados, juntos dos a dos. Al timbre, casco que mira de frente, sumado de murciélago. Lambrequines de cueros recortados y vegetales, también dos posibles sirenas adosadas, rodeando la mitad inferior del escudo, con sus colas entrelazadas. Siglo XVII.

4.   Escudito en un dintel procedente de Otal.

En un dintel monolítico elaborado en arenisca calcárea, con forma triangular, procedente de Otal, se observa gran cantidad de simbología. En un extremo hay un escudito cuadrilongo rectangular e invertido, con la base plana y la cabecera apuntada. Campo cargado de cuatro palos. Siglo XVI (fechado en 1579)

5.   Escudo en una lápida procedente de Allué.
 
Escudo cuadrilongo de base semicircular, con el campo cargado de tres palos. Bordura lisa. Al timbre: triángulo con bordura. Bajo el escudo, a cierta distancia, llama la atención una cabeza puesta de perfil y contornada. Asignable al siglo XVI, aunque con reservas.

Como se puede observar, los palos y las torres son las cargas que figuran en los campos de estos escudos.

lunes, 18 de abril de 2016

Gran sequía en el año 1683


 
En 1683 se realizaron rogativas para que lloviera:

·      Se veneró el 28 de marzo el Santo Cristo de los Milagros en Huesca, y no llovió.

·      Se veneró el 9 de abril a San Victorián, y no llovió

·      Se veneró el 10 de abril a San Úrbez, y no llovió

·      Se veneró el 13 de abril a las reliquias de Liesa, y no llovió

·      Se veneró el 14 de abril a Jesús Nazareno y comenzó a llover. No había llovido  gota desde el mes de septiembre de 1682 hasta dicho día que comenzó a llover en algunas partes. El 23 de abril estaban los sembrados de trigo (“panes”) sin nacer.

El 14 de abril veneraron a Santa Orosia (“Eurosia”) en Yebra y llovió bastante en la montaña y los abadiados de Montearagón y Casbas.

Fueron a venerar hasta Eurosia el 21 de abril en Yebra, y el día que fueron también subieron los lugares hasta Albero Alto. Comenzó a llover como rocío pero no fue nada, ni se recolectó nada en todos los secanos de las Cinco Villas hasta Tamarite y la orilla del Ebro, ni grano ni paja. Hubo grandísimas necesidades en esta tierra y perecieron de hambre muchas personas y cabalgaduras. Hubo muchas enfermedades en personas y cabalgaduras.
En resumen, fue desastroso el año 1683, con sequía extrema, sobre todo en Tierra Plana.

domingo, 18 de octubre de 2015

Escudo de Francisco Jerónimo de Castro, SEÑOR DE TRONCEDO


Antes de seguir leyendo recomiendo acceder a este enlace: http://gensobrarbe.blogspot.com.es/2015/09/el-corazon-del-senor-de-troncedo.html

Respecto a los Castro, Señores de Troncedo, de momento sólo poseo algunos datos puntuales, de los siglos XV, XVI y XVII.

En el año 1449 Johan de Castro, escudero y Señor de Troncedo, recibió dinero en forma de censal, prestado por Anthon de La Escalera, escudero, habitante en Aínsa; censal de 1000 sueldos jaqueses anuales de pensión, con 15000 sueldos de propiedad. En el año 1486 Joan de Castro era Señor de Banastón .

En el año 1571 Joan de Castro era Señor de Banastón y Troncedo, domiciliado en la ciudad de Monzón.

En el año 1635 falleció en Roma Francisco Jerónimo de Castro, Señor de Troncedo. Su corazón fue enterrado bajo una lápida, en la iglesia parroquial de Troncedo. La lápida se conserva en la actualidad de forma parcial, habiendo un escudo del cual sólo queda la zona inferior (ver foto que encabeza el artículo).
 
Según documentación conservada en el Archivo de los Barones de Valdeolivos, Casa Ric, sito en Fonz (Huesca), el escudo de los Castro, Señores de Troncedo era: en campo de plata tres bandas sinoples. Desconozco dónde se obtuvo esta información.

 
En los restos del escudo conservado en la iglesia de Troncedo se intuye que el escudo tuvo forma de corazón, en clara alusión al corazón que se colocó bajo la lápida. Además, dentro del escudo vemos una banda continua y una partición vertical. En base a esta información, podríamos describir el conjunto heráldico de esta manera:

Escudo en forma de corazón, partido, 1º y 2º tres bandas. Posiblemente timbre de hidalguía y lambrequines de cueros recortados, año 1635.

Atendiendo a los esmaltes indicados en el citado archivo, podríamos describir el escudo así: forma de corazón, partido, 1º y 2º en campo de plata tres bandas sinoples.

sábado, 10 de octubre de 2015

ALGUNOS DATOS REFERENTES AL SEÑORÍO DE BORRASTRE


A finales del siglo XVI el Señorío de Borrastre pertenecía a Joan Maça de Liçana, de las casas de San Just (San Juste), y a Domingo Giral, vecino de Castillón de Sobrarbe (Castejón de Sobrarbe), residente en la casa de Mon Pelato. Había dos Señores con idénticos derechos, poseyendo el señorío al 50% cada uno. Los Señores tenían una serie de derechos sobre el pueblo, tal y como veremos reflejado en sus tomas de posesión. Además, cobraban anualmente los impuestos señoriales.

En el año 1597, en Borrastre había unas 15 casas habitadas, cuyos propietarios conformaban el concejo general de los vecinos y habitadores del pueblo. El concejo estaba integrado por  Joan de Viñueles (jurado del lugar), Joan Ferrer (jurado), Joan de Lacort (lugarteniente de jurado), Pedro Villacampa (justicia), Pedro Bandrés, Pedro Franco, Joan de Lacort, Joan de Viñueles menor de días, Antón Ferrer, Joan Ferrer mayor de días, Pedro Viñueles, Antón de La Cort, Jayme Ferrer menor, Jayme Ferrer mayor y Pedro Tisner o Cisner, fustero (carpintero). Se repetían mucho los apellidos, lo que apunta a una elevada endogamia.

En 1597 tomó posesión de la mitad del señorío Domingo Giral de Azenar, vecino de Castejón de Sobrarbe. Lo hizo en presencia de los integrantes del concejo del lugar de Borrastre. En señal de posesión, junto con el otro Señor, destituyó del cargo de justicia del lugar a Pedro Villacampa, y a continuación lo volvió a nombrar, jurando éste el cargo. El justicia tomó de la mano derecha a Domingo Giral y lo paseó por el lugar, abrió y cerró algunas casas y mandó parar unas orcas, en señal de posesión colgaron un paño. Estos actos fueron vistos y tolerados por todos los asistentes.

En 1597 el concejo de Borrastre, reunido delante de la puerta de la iglesia, vendió los bienes inmuebles que habían pertenecido al difunto Joan de Anclada. Joan debía al concejo de Borrastre 600 sueldos jaqueses y de ahí que sus bienes fueran embargados y luego vendidos a favor de Pedro Franco, por la misma cantidad adeudada. El embargo y venta fueron autorizados previamente por los dos Señores del pueblo. Entre los bienes figuraba su casa y diversos campos, denominados: Al Caxigo de Ballella, Piedra Resa, Castias, La Coroniella, Las Pereras, Los Patrias (viña), Patreras (viña), A Lo Calçil, La Real, Moliniello, Sobre Villa y Lo Quello de Las Villas de Villanueba. El dinero que pagó el comprador se lo había prestado previamente el concejo de Borrastre.

Los señoríos también estaban sometidos a la compraventa, sirviendo a veces para paliar la maltrecha economía de un Señor. Por ejemplo, en el año 1644 los herederos fideicomisarios de la hacienda del difunto notario Miguel Giral, Señor que era de Borrastre, vecino de Castillón de Sobrarbe, vendieron a Mosén Juan La Cambra, vicario de Castejón, los derechos sobre el señorío de Borrastre, por un precio de 7000 sueldos jaqueses. Los herederos de Miguel Giral tenían que hacer frente a diversos pagos, principalmente de dotes, y con esta venta consiguieron la liquidez que les faltaba. En el año 1649 falleció Mosén Juan La Cambra, Señor de Borrastre, dejando en herencia su título a su sobrino Juan Antonio Lacambra, heredero de su casa natal en el barrio de Camporrotuno.

En el año 1650 Juan Antonio Lacambra, habitante en el lugar de Camporrotuno, barrio del lugar de Castejón de Sobrarbe, tomo posesión del señorío de Borrastre y sus rentas. En compañía del justicia y jurados del lugar, y otros vecinos, entró en las casas, abriendo y cerrando puertas, entró y salió de los campos, huertos y heredades, cavando y recolectando hierbas en los campos, y ramos de los árboles de los huertos y otras posesiones del lugar de Borrastre. Todos los asistentes estuvieron de acuerdo con lo realizado. El Señor confirmó en sus cargos al justicia, baile (alcalde) y demás cargos que eran nombrados por el Señor del lugar.

En la fachada principal de Casa Cambra de Camporrotuno, en el dintel de una bella ventana del siglo XVII, hay un escudo e inscripción asociada a él que dice: JUAN ANTONIO LACAMBRA, SEÑOR DE BORRASTE, AÑO 1676.

 


El escudo de Juan Antonio Lacambra, Señor de Borrastre, es cuartelado, y entado en punta. 1º Castillo, 2º cuatro palos, 3º trisquel inscrito en un círculo, 4º león rampante y contornado. En el entado hay un símbolo, parece ser el número 2, quizá en alusión a que Juan Antonio Lacambra era el segundo Señor de Borrastre con el apellido Lacambra. Escudo timbrado con corona abierta. Llama la atención la presencia de un trisquel celta, símbolo protector que probablemente fue copiado de otra piedra que vio el que diseñó el escudo. Con posterioridad esta figura del tercer cuartel fue representada como una rueda, siendo una deformación del original. En la parte inferior del dintel, en sus extremos, aparecen dos símbolos más frecuentes en Sobrarbe, como son la hexafolia inscrita en un círculo y una cuatrifolia en aspa, también inscrita en un círculo, que a su vez genera una cruz patada.

El título de Señor de Borrastre debió ser vendido por Juan Antonio Lacambra.

En los años 1686 y 1687 consta como Señor de Borrastre D. Gerónimo Villacampa, habitante en el lugar de Laguarta. Gerónimo Villacampa era muy rico y prestaba dinero, y diversos productos,  en distintas localidades, como Secorún, Latorrecilla o Yeba. Gerónimo Villacampa era hijo de Isabel Maza de Lizana, natural de San Juste.

Como vemos, el Señorío de Borrastre fue pasando por diversas manos, siendo sus propietarios gentes con alto poder económico que cuando veían flojear su economía familiar vendían el título (o parte de él) y los derechos de Señor para obtener dinero con el que afrontar sus deudas.

viernes, 4 de septiembre de 2015

El corazón del Señor de Troncedo





En la iglesia parroquial de Troncedo hay una singular losa sepulcral del Siglo XVII. En ella hubo esculpido un escudo, del cual se conserva una pequeña parte. También hay una inscripción:

DIMIDIUM LUNAE LUNAM CUM
PRINCIPE ROMAE
POSTULATA NOBIS DIVINO
CONDITOR ORBIS
HIC IACET COR DOÑI DOÑI
FRANCISCI HIERONIMI DE
CASTRO DÑI DE TRONCEDO
DIE 23 AUGUSTI AÑNO 1635

La inscripción viene a significar:

EL CORAZÓN DEBES DAR A DIOS, CREADOR DEL UNIVERSO, POR LOS BENEFICIOS RECIBIDOS.

AQUÍ YACE EL CORAZÓN DEL SEÑOR DON FRANCISCO JERÓNIMO DE CASTRO, SEÑOR DE TRONCEDO. DÍA 23 DE AGOSTO DEL AÑO 1635.

Francisco Jerónimo de Castro murió en Roma el año 1635, y quiso que su corazón fuese enterrado en la iglesia de Troncedo. Parece ser que Francisco Gerónimo era un personaje destacado y tenía un gran afecto a su tierra de origen. Bajo una losa bellamente esculpida reposó su corazón dentro de una cajita recubierta de terciopelo.

sábado, 27 de junio de 2015

Toma de posesión del Señorío de Banastón, año 1665

Detalle en una casa infanzona de Banastón, barrio de Usana

Ante la presencia de Martín Juan de Lissa, alcalde y juez ordinario del lugar de Banastón, compareció Don Pedro Rentería habitante en la villa de Benasque, como procurador legítimo de Don Cristóbal Bardaxí, domiciliado en la misma villa, Señor de Banastón. El motivo de su comparecencia fue la presentación ante el alcalde de unas letras posesorias emanadas de la Audiencia Real. El alcalde le contestó que daba dichas letras por presentadas y que estaba dispuesto a realizar lo que según el fuero tenía obligación.

Se procedió a la toma de posesión de la jurisdicción civil del lugar de Banastón, y el dominio y dominicatura de aquel. D. Pedro de Rentería, en nombre del Señor del lugar, procedió a la toma de posesión, destituyendo al “bayle” (alcalde) Martín Juan de Lisa y volviéndolo a nombrar. Después, continuando con la posesión, requirió a los jurados y “concejantes” del lugar que le diesen “los homenajes” que según fuero tenían obligación de darle. Cada uno de ellos respondió que no causándoles perjuicio alguno en sus derechos estaban dispuestos a darlo, los infanzones como infanzones y los de condición como tales.

Infanzones:

1
Juan de La Cambra, jurado
2
Jusepe de Raso
3
Bernad de Arasanz
4
Antón de Campo
5
Pablo de Campo
6
Pedro Lacambra
7
Juan Palacio
8
Pedro de Campo
9
Juan Sançatornil
10
Juan de Campo
11
Viturián de Pueyo
12
Juan Bardaxín
13
Juan Duesso
14
Martín Juan de Lissa
15
Juan Solanilla
16
Juan de Lisa
17
Vitorián de Pera

 
De condición y signo servicio:

1
Juan Ceressa
2
Juan Vispe
3
Bartholomé La Mula
4
Benito Mostalac

 
Después se realizaron todos los demás actos que suelen efectuarse en las tomas de posesión. Todo ello “sin perjuicio de los derechos, usos y posesiones que el lugar de Banastón tiene”.

Fueron testigos Mosén Julián Férriz, habitante en Banastón, y Domingo La Ballera, de Aínsa.

Se puede observar que la gran mayoría de los vecinos de Banastón tenía la consideración de infanzones. Había 21 cabezas de familia, de los cuales 17 eran infanzones.

miércoles, 25 de marzo de 2015

Escudo de los Pérez de Suelves que estuvo en el actual despoblado de Suelves (Sobrarbe-Huesca)


Adosada a la iglesia de Suelves hay una casa actualmente en ruinas y que en tiempos pasados perteneció a un noble que mandó colocar sobre la portada de entrada una piedra armera. Parece ser que esta piedra está ahora en Aranjuez; un representante del que ostenta los derechos del Señorío de Suelves la arrancó y se la llevó. Por suerte un antiguo vecino de la localidad, Antonio Lascorz, realizó una copia del conjunto heráldico original, elaborada en escayola. David Olivera ha realizado la fotografía, que también se puede ver en la página de Facebook denominada “Suelves Pueblo Abandonado”.

Seguidamente paso a describir el conjunto heráldico en cuestión:

Escudo medio partido y cortado. 1º brazo moviente del flanco siniestro, portando espada, 2º tres peras, siendo la inferior de mayor tamaño, 3º animal cuadrúpedo parado, de difícil identificación puesto que tiene cabeza de ovino y cuerpo de bovino. Timbre de hidalguía y lambrequines de cueros recortados. Siglo XVII.

En función de la ubicación de la casa y sus peculiares características, lo más probable es que perteneciera en el siglo XVII a los Pérez de Suelves, señores del lugar. Primitivamente el escudo familiar debió de ser de los denominados parlantes, con el campo ocupado por tres peras en alusión al apellido Pérez, al igual que ocurre con los Pérez de Aluján. Con posterioridad se diseñó un nuevo escudo, añadiendo particiones y nuevas figuras.

domingo, 15 de marzo de 2015

Piedras armeras en Castejón de Sos


Castejón de Sos es una localidad ribagorzana ubicada en el Pirineo, Valle de Benasque, a unos 900 metros de altitud, en la margen izquierda del río Ésera.
 
Visité este pueblo el día 12 de octubre del año 2013. Aquí vivieron varios de mis antepasados, con apellidos como Cuguera y La Riba-Larriba. Hubo relaciones de parentesco entre casas de Castejón de Sos y familias sobrarbesas, como los Rins de Gistaín, Mur de Plan, Bardaxí de Puyarruego, Cosculluela de Charo etc. Se trata de familias de alto nivel económico.
 
En Castejón vi varios conjuntos heráldicos que fueron realizados en los siglos XVI y XVII. Tienen todos en común el estar en la clave de grandes portadas doveladas y biseladas, o molduradas. Seguidamente se muestran los escudos, pertenecientes a distintos apellidos: Arpajón, Castell y Cuguera. Estos apellidos ya estaban presentes en el pueblo en el último tercio del siglo XVI. Hay un escudo en la antigua iglesia que parece hacer referencia a San Sebastián; a él estaba dedicada la iglesia.
 


Piedra armera de los Arpajón o Arpayón, reconvertida en escudo del ayuntamiento de Castejón de Sos.
Campo ovalado, ocupado por un arpa surmontada por una estrella de seis rayos. Lambrequines de cueros recortados. Bajo el escudo, inscripción muy curiosa: GARA. Posiblemente del siglo XVII

Escudo invertido, cuartelado y con los campos lisos, presente en casa Seira

Piedra armera de los Castell en casa Castel. Escudo cuartelado: 1º campana sin badajo, 2º castillo, 3º torre?, 4º tallo con tres flores. Parece ser de finales del siglo XVI o principios del XVII

Piedra armera de los Cuguera en casa Cubera. Campo ocupado por una panela atravesada por una saeta puesta en banda y punta abajo. La morfología del escudo, con cabecera bicóncava y la base apuntada, es típica del siglo XVI.  Quizá sea el escudo más antiguo del pueblo. Anteriormente a la llegada de los Cuguera, regentaron la casa los Castain o Castán, y no es descartable que primitivamente este escudo fuera de los Castain-Castayn

Escudo con el campo ovalado, ocupado por una saeta en palo y punta arriba. Lambrequines de cueros recortados. Realizado a finales del siglo XVI, posiblemente pensando en San Sebastián, el titular de la parroquial

Bello llamador
 

martes, 17 de febrero de 2015

Problemas económicos del concejo de Puértolas, año 1679

Iglesia de Puértolas, detalle de la bella bóveda estrellada.

En la segunda mitad del siglo XVII la situación económica de la mayor parte de los concejos de Sobrarbe era insostenible. A lo largo de varios siglos se habían ido endeudando y llegó un momento en que era imposible afrontar pagos, quedando dos soluciones: proceder al embargo y venta del pueblo o quitar una parte de la deuda, siendo esta segunda opción la que se fue adoptando, con la aprobación de las altas instancias del Estado.

El siglo XVI se caracterizó por el excesivo gasto, acudiendo al endeudamiento mediante censales. Podríamos decir que se vivió por encima de las posibilidades. Algunos concejos quisieron realizar impresionantes iglesias que a la larga supusieron una gran carga sobre las generaciones venideras. El orgullo y la ostentación se acabaron pagando caro.

En el año 1679 el concejo de Puértolas estaba en quiebra técnica. Se debían 800 escudos de atrasos y además había que pagar anualmente 319 escudos, cuando los ingresos rondaban los 100 escudos.

Deudas anuales del concejo: 319 libras y ocho sueldos jaqueses

Prestamista
Cantidad
Antonio Lanao de La Buerda
52L 10S
Pedro de Buerba, del mismo lugar
27L 10S
Mosén Agustín Portaspana, de San Juan
22L
Antonio García, de Bielsa
20L
Quiñón de Vió
20L
Beneficiado de Araguás
20L
San Viturián
14L 10S
Barbastro
10L
Boltaña
20L
Juan de Broto, de El Grado de Guaso
20L
Cosculluela, de Lamata
08L 8S
Juan de Mur, de Saravillo
20L
Juan Ceresuela de Pujarruebo
20L
Pedro Boil del Pujo (El Pueyo de Araguás)
05L
Beneficiado de Banastón
05L
Miguel de Latre, de Gallisué
05L
Juan La Mua (posiblemente de Banastón)
05L
Juan de Puértolas, de Fanlo
05L
Miguel Burrué, de Vió
05L
Fanlo
02L 10S
Lugar de Tella
05L
Badaín
02L 7S
Aínsa
02L 10S
Pedro Nerín, de Fanlo
05L
Miguel de Buerba, de Fanlo
02L 10s
Cofradía de La Valle
14L
Cofradía menor de La Valle
07L 10S
Sesa
08L 3S
Joan Cosculluela, de Jaro (Charo)
05L
Total
319L 8S

 

Ingresos anuales del lugar 110 libras y 15 sueldos jaqueses

Molino, que vienen de otros lugares
32L
Primicia
25L
Mesón
10L
Taberna
02L 10S
Panadería
00L 15S
Hucha de los ganados menudos y gruesos
40L
TOTAL
110L 15S

 
Mediante un escrito dirigido al Consejo de Aragón solicitaron la cancelación parcial de sus deudas. Desde Puértolas se elaboró un memorial poniendo el asunto feo, intentando que fuera escuchada su propuesta. Veamos un resumen de su escrito y argumentos:
 
En nombre de los jurados, concejo y clerecía del lugar de Puértolas, en el reino de Aragón, se hace un memorial para que sea examinado en el Consejo de Aragón y se emita resolución.
 
Desde la villa de Puértolas se informa que pagan muchos censales a sus acreedores. La situación actual es mala, empeorada por diversos hechos.
 
El lugar de Puértolas confina con Francia, menos una ballonada que hay de por medio y que se pasa en una hora, distante de la villa de Bielsa 3 leguas. Los franceses o barachines se llevaron en dos ocasiones la mayor parte del ganado que tenían los de Puértolas en la raya de Francia. Además de la pérdida de ganado, se han generado gastos por la necesidad de contratar un espía o guarda para que no se lleven el poco ganado que queda. El pueblo se ha endeudado en más de 100 libras, en dos ocasiones, para el pago del guarda. Hace quince años había mucha mayor riqueza, por lo que el concejo obtenía más ingresos; había 6000 cabezas de ganado menudo y más de 200 de ganado grueso y en la actualidad no se llega a 2000 cabezas que son de dos clérigos y de tres que tienen firmas y están muy a punto de desamparar el lugar, por lo que se perdería toda la renta de que se dispone.
 
Si el pueblo se deshabita, los franceses tendrán la entrada libre. Esta valle y villa tiene prevenidos sesenta soldados pagados a su costa en defensa del real patrimonio de su majestad. Cuando vino Don Alberto Arañón se obligó el pueblo a dar un soldado de cada casa.
 
En el lugar hay 21 vecinos (casas) y se obtienen pocos ingresos puesto que la mitad de las casas no tienen con qué sembrar, carecen de cabalgaduras. Se recolecta poco trigo.
 
La iglesia se sustenta de limosnas. Se pagan muchas pensiones que ascienden a 90 libras, sacándose pocos ingresos. En el año 1678 quedó a deber la primicia más de 2214 libras.
 
Corren malos años en esta tierra. Se hallan los vecinos muy disminuidos en medios para el cumplimiento de los pagos de los acreedores los cuales están continuamente hostigando. Por ello el ánimo en el pueblo es bajo y se plantean el dejar sus casas y haciendas por no tener forma para el pago de los censales.
 
Por todo ello se suplica se les conceda la concordia como a las demás villas y lugares; en esta tierra pagan la cuarta parte como ocurre en la villa de Bielsa. Puértolas sólo pide la cancelación de la mitad de la deuda, y están de acuerdo en ello la mayor parte de los acreedores, que miran de no perderlo todo, que será forzoso si los vecinos desamparan el lugar.
 
Se pide a V. Alteza mire con ojos de misericordia a esta pobre gente y fieles vasallos de Su Magestad y se pide concordia para que dichos acreedores pierdan el tercio o la mitad, y aun así será dificultoso el cumplimiento.
 
Como vemos, los vecinos de Puértolas, aparentemente libres, eran esclavos de sus deudas que les impedían tener una vida digna.